Reto #CuentoSin
Todos los cuentos
¡Saludos, planeta!
Esta semana nos divertimos muchísimo en nuestro primer reto en Twitter de #CuentoSin, y a partir de ahora y todos los miércoles, nos quebraremos el coco para componer un microcuento con alguna limitación que estaré indicando.
Les regalo algunas estadísticas, nube de palabras y mapa de participación del reto:
Los participantes aparecerán en este blog, así que espero que sigamos sumando locos que quieran aportar su creatividad literaria al superfluo altar del entretenimiento.
Sin más, he aquí los primogénitos del #CuentoSin:
Soñaba un lugar do su amor por sí misma, su honor y su paz convivan juntas sin dificultad. Lo logró al volar al su país original y halló aún mucho más.— 🧝🏻♀️ Sue al'Vere (@quementari) 20 de junio de 2018
Sin más vivió cada hora como si la vida acabara ahí. Una inspiración podía acabar con su vida, como una anafilaxis. Y todo por robar una vocal vital.#CuentoSin— Cajón de Relatos (@CajonRelatos) 20 de junio de 2018
Miró la pantalla y con agilidad liaba un cigarrillo.— Informático Farero (@informatifarero) 20 de junio de 2018
No sabía como plasmar lo imaginado.
Dió una profunda calada al cigarrillo, y sirvió un chupito.
Un micro había que parir, sin usar un signo...
Probó a narrar una diminuta composición.
Mas la acostumbrada chispa no hallaba...
Subió hasta la cima tiritando. Abajo, las ávidas criaturas vigilaban ansiosas todos sus pasos. Imaginó un óbito anticipado y caviló abrumada su virtual salvación. Pronto, todo pasaría rápido y su alma viajaría a un lugar ignorado. Y cuando ya no había optimismo, todo cambió.— David Yanes (@DavidYanes79) 20 de junio de 2018
-¡Ay, Santo Dios! Tu cara; toda morada. Algún barbajan ha lastimado a mi hijo— Lina Fan (@LinaOM2205) 20 de junio de 2018
-Mmm no, no ha sido un barbajan. Pasó algo más... ridículo.
-¿Ridículo?¿Cómo?
-Fui atacado por una ardilla cuando comía mi fruta; ganó y ya. Ni una palabra más.
-Humillado por una ardilla ¡Bah!
Dijo no. Y cortó toda posibilidad. La magia murió con la traición. Marzo, abril, mayo, junio, julio, agosto, pasaron mudos. La nostalgia no la alcanzó. Dijo sí y, la magia no nació. No hay milagros, dijo, hay olvido y mucho trabajo para los dos.#CuentoSin— Gabriel Martín Cuvillas Pérez (@Gamacupe) 20 de junio de 2018
Lloró como una niña, agobiada y dañada por su amor. ¿Amor? Falso! Adoración, quizás idolatría. Gran falla suya imaginando fantasías.#CuentoSin— Sara Silva (@Saris_SilvaRo) 20 de junio de 2018
Un matutino rayo por la cortina finaliza mi largo soñar y al abrir lo ojos capto mi amada marcho ya, la habitación sola con un tibio tinto y un cigarro para fumar, ratifican un día más, con mi amada hasta la vida acabar y la distancia no podrá día tras día un idilio acabar.— Ruben'Z (@Rubencho8729) 21 de junio de 2018
Duro sin dicha vocal . Soñaba la dama al vibrar agobiada por no formar palabras con lo prohibido.— @honestamente (@honestamente3) 21 de junio de 2018
Amaba narrar .un cigarrillo fumaba cuando anotaba cuánta cosa imaginaba para salir ganadora . Proclamaba su galardón a frank mirando su blog
La miraba aturdido, la amaba y no podía imaginar abandonarla.— Pelirroja (@vivilumo) 20 de junio de 2018
Su corazón fracturado, palpitaba tan roto y arruinado.
Míralo, otra víctima al amar. Otra ilusión partida, a la misma hora, a la cicatriz pasada.
Anciosa y con los ánimos arriba, mañana voy a gritar otro gol anotado por un compatriota. Sigan sigan animando, somos un país luchador!— Carolina (@sicalodi) 20 de junio de 2018
Prohibido nombrarla, tampoco aludirla. Inspiraba una historia sagrada y aburrida. Difícil, muy difícil inscribir una sílaba. Así las cosas, por la máquina antigua una clavija faltaba. Ni la a ni la i ni la o, tampoco la u. No, faltaba una sola, la única, la rotunda vocal maldita.— Melina G. (@MelMeliMeluzka) 20 de junio de 2018
Miró la hora, una cicatriz dibujó su madrugada... no dio más, cansado, marchó a su último suspiro. #CuentoSin— Alex Moreno (@alexmorenog) 20 de junio de 2018
-Vaya imaginación la tuya, andar torturando margaritas para invocar a tu amor.— Lina Fan (@LinaOM2205) 21 de junio de 2018
-¿Y tú? Orando a tu amigo imaginario por salvación.
-¿Ha llegado tu amor?
-¿Y tu salvación?
-¡Ya por favor! ¡Pongan a los locos a dormir!, ¡Traigan sus píldoras!
Sin corazón, sustraído por amor, optó por no hablar más con la dama, soñando con olvidarla para no sufrir más. Añoraba su voz, su risa, sus labios. Había sido apartado, amputado, y solo podía llorar por no lograr tornar al pasado. @herrera_fk #cuentosin— Microrrelatos (@Narratorio) 20 de junio de 2018
Sacaba sin prisa su sonrisa, sabía cuando usarla para trastornar a los machos y lograr sus caprichos. No miraba atrás por timar a brutos misóginos, lo vivía como justicia social.— Microrrelatos (@Narratorio) 20 de junio de 2018
SIGLO XXI— Microrrelatos (@Narratorio) 20 de junio de 2018
¿Graduado?Trabaja por un salario ridículo con un horario abusivo, compra casa, gasta, haz una familia, compra cosas vanas, gasta más; hola crisis, adiós trabajo, llora una vida frustrada, acaba sin casa y suplicando ayuda a políticos corruptos.
Sin corazón, sustraído por amor, optó por no hablar más con la dama, soñando con olvidarla para no sufrir más. Añoraba su voz, su risa, sus labios. Había sido apartado, amputado, y solo podía llorar por no lograr tornar al pasado. @herrera_fk #cuentosin (sin la letra e)— Microrrelatos (@Narratorio) 20 de junio de 2018
#CuentoSin— Deni...🏠💞💞 (@deni_denissd506) 21 de junio de 2018
La mañana calida anuncia lluvia, horas por venir, no rocío, fortísima agua, sin límites, ya aquí, la oscuridad nocturna, paz y tranquilidad, todo pasó.
Ocho barcos cargados con balistas y dos mil soldados ansiosos por luchar. La mar cobró vida y puso fin a su avaricia.— Viktor Lamb (@ViktorLamb) 20 de junio de 2018
No hubo gloria para ninguno.#CuentoSin#Microcuento #365Microcuentos pic.twitter.com/nGvQxf3Bou
Abrí los ojos un día y todo lucía tan claro. La vida nos dio otra oportunidad para vivir sin hilos rojos ni ataduras. #CuentoSin pic.twitter.com/Ls4ukJQ5pW— Maru Bolaños (@MaruBV13) 22 de junio de 2018
Apartó su corazón y salió buscando un indicio para saldar cosas sin intuir su final, sin indagar su vida hasta probar el amor. #CuentoSin https://t.co/c8gplIho4H— Monica Mora Mata (@moesse888) 21 de junio de 2018
Partió al mar a buscar a sus hijos imaginarios, y nunca mas volvió. #Cuentosin https://t.co/JGI21bdsdS— Ver&Escribir (@veryescribir) 21 de junio de 2018
La chica lo amó sin dudar, más no lo ató a su vida. La chica sabía amar sin ataduras. #CuentoSin https://t.co/sfDDTOXG5L— Angie Araya Coach (@angiearaya23) 20 de junio de 2018
Siguió hasta un claro.— Historias mini (@historiasmini) 20 de junio de 2018
Malvada vida.
Los gatos carnívoros lo aguardaban.
La misión había fracasado.
Tomó la granada, mataría muchos gatos cuando lo atacaran. #CuentoSIn
@herrera_fk la mañana, hora apropiada para su caminata acostumbrada. Solía soñar, hablar, llorar, amar... Por cada paso dado. #CuentoSin— 🌟Lenita Mija🌎 (@RUBYELENA1) 20 de junio de 2018
#CuentoSin— Dagmar Sola (@DagmarSola) 20 de junio de 2018
Cada mañana, cantaba a las hadas. Lo hacía con una dulzura inusitada. No soportaba a los otros así como sus burlas. Por tal razón, pasaba sus horas junto a las hadas. Las únicas cuya amistad valoraba.https://t.co/GqiNgGrpyh
Las lágrimas caían por su cara, miró a mis ojos y habló con voz chillona, imitando mis últimas palabras con tono infantil:— M. Floser (@M_Floser) 20 de junio de 2018
—¡Diji di mitirti quin migui! —sonrió burlona con los ojos muy rojos y mocos colgando bajo la nariz—. ¡Marcos, vas a ir a papá y a mamá!#CuentoSin https://t.co/YNBwyPRAkH
La tinta fluía por la hoja a con la pluma. Continuó manchándola cambiando la tinta oscura a roja. La mano ya no porta una pluma, ahora su mano sangra. Lo llamó pasión por no llamarlo horror y dolor.#CuentoSin https://t.co/ytki0s06rL— Cajón de Relatos (@CajonRelatos) 20 de junio de 2018
Una dama traicionada por su amor, dos hijos sin futuro, y un tumor maligno colisionando con su masa muscular.— atlantisra (@atlantisrach) June 20, 2018
Sus manos abandonaron al manubrio y al mismo minuto sus zapatos apuraron la distancia, "Porfavor, no lo hagas", profundizó su pantalla, omitió dichas palabras y
Por la madrugada una niña caminaba por la playa mirando las gaviotas aún dormidas. Las olas acariciaban la costa con un susurro rítmico. La niña paró cuando logró la última casa, situada junto al mar. Un niño salió.— Alicia Brunskill (@aliciabrunskill) June 21, 2018
- Ana, ¿nos vamos? -
- Sí Oto, ¡y no paramos nunca! -#CuentaSin https://t.co/P0uI2kh0SW
¡Nos leemos el próximo miércoles!
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